Un niño de siete años murió la madrugada de ayer decapitado al salir despedido del coche en el que viajaba con sus padres, a la altura del kilómetro 56 de la carretera N-I, en la Comunidad de Madrid. El vehículo, en el que también viajaban los padres y un hermano del niño, circulaba hacia las 5.30 horas en sentido Madrid cuando, por causas desconocidas, saltó la mediana y quedó sobre la calzada en sentido hacia Burgos.
Su hermano de veintidós meses presenta policontusiones y el padre, de 37 años, fractura de fémur. La madre, de 36 años, sufre un traumatismo abdominal y policontusiones.
En Murcia, tres mujeres murieron la noche del domingo al salirse de la vía el vehículo en el que viajaban en compañía de otras ocho personas, cuatro de ellos menores, y que resultaron todos heridos de gravedad.