Palma ostenta el dudoso récord de ser una de las ciudades más sucias de España y de buena parte de Europa. Basura, grafitis, trastos en la calle, contenedores a rebosar, deposiciones de animales en las aceras…Y no es que Emaya no limpie, que sí lo hace, sino que los ciudadanos pasan absolutamente de todo. Les dan exactamente igual las normas; es más, muchos las desconocen y si no lo hacen parece que la cosa no va con ellos. Creo que ha llegado el momento de actuar y de hacerlo muy seriamente y como no hay nada más efectivo que imponer multas cuantiosas, hay que revisar las ordenanzas y sancionar duramente a todos los que hacen caso omiso de las leyes. Y lo mismo vale para bicicletas y patinetes. Ya ha pasado un tiempo de adaptación y es inadmisible que estos conductores campen a sus anchas por carriles bici y aceras. ¿No saben que un paso de peatones no puede cruzarse subido en cualquiera es estos vehículos? Se ve que no, por lo que antes de permitirles circular tendría que ser obligatoria una formación que evitara muchos accidentes.
Incivismo en Palma
María Luz García | Palma |