En casa ya pasamos por la experiencia del bichito travieso. El coronavirus entró en nuestro cuerpo y nuestro sistema inmunitario se encargó de vencerlo. Os cuento mis síntomas. Fue como un resfriado fuerte o una gripe floja, según se mire. Dolor de cabeza. Frío en los huesos. Sensación de debilidad. Tos. No tuve fiebre, pero mi hija sí. Ninguno de los que estuvimos en casa perdimos el sentido del gusto. No tuvimos miedo alguno. Los adultos estamos ya vacunados, los peques no. Nuestro lema es: nada puede vencer a una familia fuerte y unida.
La verdad es que la entrada en escena de este bichito travieso ha cambiado la vida de millones de personas. A día de hoy no podemos negar la existencia del coronavirus, ni tampoco sus efectos en el cuerpo humano. Al principio se estimaba que podía llegar a matar a un porcentaje bajo de la población (la mayoría de la cual en estado de riesgo: avanzada edad, enfermedades coronarias...), pero ese porcentaje bajo de la población se traducía en miles de personas que morían cada día en nuestro planeta. Una vez vacunada la mayor parte de la población parece que todo debería acabar aquí, pero nada más lejos de la realidad. Ciertos medios de comunicación nos siguen bombardeando con noticias angustiosas que ahora no se centran en los muertos, sino en los contagiados. Parece que en el mundo sólo hay un protagonista, que es minúsculo, entra en nuestro cuerpo y nos hace la vida imposible.
A mi humilde modo de ver, este bichito vino para quedarse. En un tiempo récord salieron diversas vacunas a la vez, que nos pusimos sin pensar. Claro que está demostrado que la vacuna ha salvado vidas y nos ha protegido contra los efectos del coronavirus. Lo que no sabemos son los efectos de la vacuna a medio y largo plazo. Y eso es lo que a mi y a mucha gente nos está empezando a preocupar. Nunca jamás había sido tan obligatoria una vacuna que no es obligatoria. Te piden tu certificado de vacunación por todos lados. Si no estás vacunado, no entras. Yo siempre he estado al lado de la ciencia y lo seguiré estando. Pero tengo ya sobre este tema demasiadas preguntas en mi cabeza que se han quedado sin respuesta y me hacen dudar. ¿A ustedes les pasa algo similar?