Le gustan los videojuegos, tiene curiosidad y te sorprende con ideas de lo más creativas… ¡tiene un desarrollador o desarrolladora dentro! Y gracias a Estudio de videojuegos, ya disponible en la eShop de Nintendo Switch, los peques (¡y los no tan peques!) van a poder descubrirlo y ponerlo a trabajar mientras se divierten creando y compartiendo sus propios juegos.
Niños, adultos, fans de los puzles, gente con algún conocimiento de programación o sin absolutamente ni idea de cómo funciona un juego por dentro… siempre es buen momento para aprender algo nuevo, y en Estudio de videojuegos no es necesario tener experiencia previa. Al contrario, está planteado para que el aprendizaje sea muy gradual y está articulado en siete lecciones interactivas que van introduciendo los conceptos básicos de programación y pensamiento computacional de una forma progresiva y entretenida. David Alonso, director del Grado en Diseño y Desarrollo de Videojuegos de ESNE, considera que todas estas características hacen de Estudio de videojuegos “una muy buena puerta de entrada para iniciarte en los principios de programación”.
¿Y cómo funciona? En seguida, el usuario conocerá a unos seres muy peculiares llamados nodon, cuya colaboración será esencial para crear un juego desde cero. Hay decenas de nodon en Estudio de videojuegos, cada uno con su propia función y, al conectarlos de distintas maneras, los usuarios conseguirán crear reglas que les permitirán plasmar sus ideas en el juego. Por ejemplo, al conectar un nodon de botón con un nodon de persona, los usuarios crearán un personaje humanoide que sepa saltar cada vez que pulsemos “B”. Y esto es solo el principio… Con alrededor de 80 nodons, es posible crear todo tipo de videojuegos, desde plataformas de desplazamiento lateral hasta juegos de carreras, pasando por títulos de disparos en el espacio exterior.
Además de David Alonso, otros profesionales de la industria como Arturo Monedero, diseñador de videojuegos y vicepresidente de desarrollo de AEVI, han tenido oportunidad de probarlo y poner a prueba su potencial. Para Monedero, “Estudio de videojuegos es un caramelo” y afirma “¡Ojalá lo hubiera tenido yo de niño!”. Además, destaca la sencillez de su interfaz y apunta a que puede ayudar a “ser la chispa que despierte esa creatividad en los niños y, sobre todo, aportarles algo muy bonito que es poder ver los resultados en tiempo real”.
En ese sentido, Estudio de videojuegos es enteramente visual: no hay posibilidad de fallar, ni líneas de código farragosas y complicadas que puedan frustrar a los aspirantes a programador. Cada lección enseña a hacer un pequeño videojuego independiente, cada uno de un género distinto, que el jugador podrá probar en cualquier momento para comprobar y disfrutar de su progreso. El jugador se encontrará a menudo con preguntas como “¿y cómo podemos hacer para que el coche gire automáticamente a la derecha?” o “¿y si quisiéramos que este alienígena pudiera lanzar proyectiles?”, que le obligarán a recurrir a su pensamiento lógico y despertarán su creatividad para encontrar la solución más adecuada. Además, entre lección y lección encontrará un Punto de Control, donde se pondrán a prueba la resolución de problemas en base a las técnicas aprendidas en la lección anterior. ¡Mucho ojo a estos puzles!, los jugadores más ingeniosos seguro que encontrarán en ellos alguna buena idea para incorporarlas en su próximo videojuego.
Una vez nos sintamos con confianza, es el momento de dar vida a nuestras ideas en el modo “Programación libre”, donde los usuarios pueden sacar provecho de las habilidades aprendidas en las lecciones. Además, si los usuarios quieren buscar inspiración, pueden intercambiar y descargar juegos con familiares y amigos a través de internet o mediante una conexión local. Así no solo presumirán de creaciones, sino que también podrán echarles un ojo a los juegos de otros usuarios. Hasta es posible usar el modo “Programación libre” para observar cómo se han programado los juegos de otros usuarios y aprender algún que otro truco útil.
De acuerdo con los expertos, Estudio de videojuegos llega en un momento en que la programación es una competencia cada vez más interesante para los jóvenes. David Alonso, de ESNE, recuerda que cada vez nos comunicamos a un nivel más profundo de la tecnología y que se está estudiando cómo incorporar este conocimiento en la educación primaria. A ese respecto, afirma: “Me parece muy interesante que los niños en edad muy temprana ya tengan ese primer acercamiento a la programación”, y destaca precisamente su vertiente lúdica como parte de su éxito. “Es muy interesante incorporarlo también de forma entretenida, no como algo obligatorio sino como una experiencia divertida, como es Estudio de videojuegos. Está estudiado que cuando aprendes algo porque quieres es un aprendizaje mucho más efectivo”, argumenta Alonso.
Estudio de videojuegos puede controlarse con un mando Joy-Con o un mando Pro de Nintendo Switch, y también es compatible con Nintendo Switch Lite. Sin embargo, ¡también se puede controlar con un ratón compatible conectado al puerto USB de la base de Nintendo Switch! Esta opción es ideal para los usuarios que prefieran recurrir a un ratón a la hora de usar el programa.
Estudio de videojuegos está ya disponible en Nintendo eShop por 29,99€.