PALMA

Dimonis y música en el Parc de la Mar

La revetla congrega a cientos de personas que disfrutan de variadas actividades participativas y propuestas musicales

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Inicio del correfoc nocturno en el que participaron una decena de colles | Foto: P. Pellicer

| Palma |

La víspera de Sant Joan es una de las noches más mágicas del calendario. Cuenta con miles de devotos que, año tras año, realizan hechizos al filo de la medianoche para que la suerte les acompañe. Con el fin de dinamizar y ofrecer un ambiente lúdico, desde la tarde se llevaron a cabo actividades en el Parc de la Mar, ideadas por la Federació de veïns de Palma y con la colaboración del Ajuntament.

Las diferentes propuestas, entre las que destacaron los dimonis y los conciertos, contaron con una gran afluencia de público que no quería perderse una noche mágica a la que tradicionalmente se le otorgan extraños poderes.

Correfoc

La velada comenzó a las 20:30 con un correfoc infantil, a cargo de los Dimonis Enfocats, Kimfumfà, Petis Encabritats y Realment Cremats, que pusieron toda la carne en el asador y calentaron el ambiente. El espectáculo infantil dio paso, con la puesta de sol, a un fuego que simbolizó otra cosa: la flama per la llengua, en colaboración con la Obra Cultural Balear, fue la encargada de encender la hoguera de la noche de Sant Joan, algo que, según la entidad, «resulta especialmente importante en estos momentos». También el público pudo disfrutar de un ball de bot tradicional a cargo del Al-Mayurqa.

Uno de los momentos más esperados en la revetla del Parc de la Mar fue el encendido del fogueró.
El correfoc infantil hizo bailar y vibrar, bajo los paraguas de pólvora, a los más pequeños en una noche muy animada.

La presencia de muchos de los vecinos, atraídos por la música y el jolgorio, se repite año tras año. Así, Sare y Joaquín son dos de los que decidieron acudir al Parc de la Mar, pero consideran que la «magia también está en verlo y en la oportunidad de estar en la calle con amigos disfrutando», señalan.

El pregón llegó a las 22:00, a cargo de la presidenta de la Federació de veïns de Palma, Maribel Alcázar. Fue escenificado mediante dos personajes: el de la propia presidenta y el de una actriz, que fueron refiriéndose a la fiesta de Sant Joan como una cita «ciudadana, abierta, plural y con identidad propia» de la que pueden disfrutar los que nos visitan «con ánimo de conocernos». Alcázar destacó que «no se trata de una fiesta comercial ni para turistas; es para la ciudadanía y lleva 40 años en el parque del mar», algo que ayuda a no olvidar que el espacio «es fruto de una conquista vecinal, ya que se quiso proyectar un aparcamiento». Tuvo también palabras para «las personas que luchan por tener un techo sobre su cabeza o que viven en habitaciones hacinadas y en caravanas», señaló en referencia a los problemas de acceso a la vivienda.

Al caer la noche, el Parc de la Mar se llenó de colles de dimonis que ofrecieron un gran espectáculo ante un público ávido de fiesta celebrando la noche más corta del verano.

Incluyó un reconocimiento a Iguana Teatre, que cumple 40 años sobre los escenarios y que «creó la Nit del Foc en el Parque del Mar y que nos dejó como herencia las collas de dimonis» que se han «convertido en un clásico en esta noche de Sant Joan».

Después del discurso, se cerró el apartado institucional, y la fiesta continuó con la actuación de Pell de Gall, que regaló a los presentes sus canciones más conocidas, como Junts, Paradís o In Menorca Tonight. Después del concierto de la banda menorquina fue cuando muchos de los presentes decidieron apostar por la magia.

«Cada año vengo y hago mis rituales para tener un verano mejor», señala uno de los asistentes que acude habitualmente a la noche mágica para entonar rezos y realizar hechizos que encuentra previamente por internet. Uno de ellos, elaborado con hojas de laurel, debe ser enterrado en la arena justo a las 12 de la noche. «Con esto se supone que consigues tener suerte. Mientras lo entierras, tienes que pensar en cosas buenas que quieres que te pasen», explica, mientras muestra los objetos de los que deberá desprenderse a medianoche.

«Nosotros quemaremos papeles para que se cumplan los deseos que apuntamos previamente», aclara Camila, una venezolana que pasa las vacaciones en la isla y acudió con Alfredo, que anda cargando con una nevera para la bebida.

Otra de las que acudió a la cita, acompañada por sus amigos, fue Esther. Ella elabora rituales más sencillos, le gusta dejarse llevar por la gente que está en la playa, encender velas con música de fondo y bebidas. «Nosotros solo metemos los pies en el agua, eso ya trae buena suerte. Normalmente lo celebramos en Palmanova», destaca.

Lo cierto es que la víspera de Sant Joan no solo es una noche mágica de rezos y hechizos, también se convirtió en una fiesta muy viva en la que tiene cabida la reivindicación y la música, con un ambiente lúdico del que miles de ciudadanos disfrutaron.

3 comentarios

Miris on miris, tot són guiris Miris on miris, tot són guiris | Hace 17 días

MarianganxaNo dona, dimonis, foc... sempre estan presents a les festes de qualsevol zona dels Països Catalans, és la nostra cultura

Donald Trump Donald Trump | Hace 17 días

Marianganxaqualsevol festa popular és d'esquerres, les dretes són avorrides i fan olor de naftalina.

user Marianganxa | Hace 17 días

Dimonis, correfocs....son festes de la progresfera.

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