Ana Carmen Marín asumió el pasado febrero la presidencia del Club Elsa con la intención de darle un nuevo impulso y continuar el legado de su tía, Juana Walker, una de las fundadoras de la entidad.
Marín explicó a este periódico que «para este año nos hemos marcado varios objetivos. Uno es duplicar el número de socios, que son la base del club. Actualmente somos unos 70 y habría que haber más. También nos gustaría rejuvenecer la entidad y conseguir más voluntarios para los cuatro o cinco eventos que organizamos al año».
La nueva presidenta añade que «hemos incrementado el número de lotes de comida que damos cada miércoles a las personas que más lo necesitan. Ahora entregamos entre 40 o 60, más o menos. También trabajamos con otras asociaciones a las que si necesitan alimentos o ropa les damos un cable. Además, nos gustaría fortalecer la comunicación con las empresas que nos ayudan y conseguir nuevos colaboradores».
Marín defiende que «la gente ve el rastrillo ideal y perfecto pero detrás hay un gran trabajo de mujeres maravillosas que pudiendo estar en su casa están todos los días en el almacén lavando ropa, planchando, clasificándolo todo: libros juguetes… Hay un trabajo bastante importante detrás».
Aniversario
«He vivido el Club toda la vida y en tiempo de la pandemia me pidieron ser la presidenta para potenciar las redes sociales y darle vida», explica Marín. Sobre el 50 aniversario que celebrará la entidad en 2027 promete que «haremos una gran fiesta y también nos gustaría crear una pequeña publicación donde se cuente la historia de nuestra asociación».
El Club Elsa organizará uno de sus clásicos rastrillo solidarios en el Velòdrom Illes Balears (anterior Palma Arena) entre el viernes y el domingo de esta semana.