Es uno de los rostros más conocidos de la televisión. Ivana Icardi (Rosario-Argentina 1995) se crió en las Islas Canarias, donde estudió Lenguas Modernas y Diseño de Moda, pero rápidamente se hizo un hueco en el mundo de los reality shows. En España le hemos visto como participante en Supervivientes, pero con 20 años de edad, y siendo hermana del conocido futbolista argentino Mauro Icardi, entró en el programa televisivo Gran Hermano, de Argentina. «Me expuse 24-7, teniendo un hermano famoso. Fue difícil psicológicamente, pero quedé finalista», comenta.
Ivana reside en Mallorca desde su salida de Supervivientes, de Tele 5, donde conoció a Hugo, padre de su hija. «Soy muy enamoradiza», confiesa. De hecho, durante su convivencia televisiva en Argentina, se enamoró de uno de los participantes, un italiano con el que se fue a vivir a Roma. «El roce hace el cariño». Poco después entró en Gran Hermano Italia. «En Italia explotó una bomba mediática con el caso de mi hermano, ya que era el capitán del Inter de Milán». Ha hecho tres realities en tres países diferentes. «Entré en Supervivientes en 2020, que fue el año de la pandemia, y me volví a enamorar del que es hoy el padre de mi hijo. Él vivía aquí, en la Isla, y aunque nuestra relación no continuó yo decidí quedarme en Mallorca con mi hija. Me enamoró este lugar, por su paisaje, su gente y porque desde que estuve en Supervivientes noté una conexión especial con la naturaleza y en concreto con el mar». De aquella experiencia destaca que «terminé enamorándome, llorando y pasándolo mal. Si voy con estrategia, a los dos días me olvido. Tengo un gran sentido del humor y me río hasta de mis desgracias».
Mujer empoderada
Soltera, luchadora y mujer empoderada, Ivana es trabajadora y emprendedora. «Actualmente llevo la distribución para España de los astilleros italianos Wider, de embarcaciones de 16 a 100 metros y el catamarán Wider Cat 92. El año pasado fue el de cambios en mi vida». Viviendo uno de sus mejores momentos, Ivana asegura que «hoy por hoy no iría a ningún reality por mi hija. No me quiero perder su infancia. ¿Ir a Masterchef? Creo que eso sería difícil pues aunque toda mi familia cocina muy bien yo soy más de que me lleven a restaurantes».
Sin embargo, desde pequeña lo que siempre le ha gustado a Ivana es cantar. «Vengo de una familia muy deportista y durante años he jugado a baloncesto y aunque me dediqué a los reality shows durante mucho tiempo, lo que a mi más me gusta es cantar». Una pasión para la que hace poco decidió dar un paso más. «Me estoy formando con una profesora y cantante de aquí, de Mallorca, y no descarto, más adelante, grabar un single. Amo cantar».
Para el padre de su hija, Hugo Sierra, sólo tiene buenas palabras. «La verdad es que no puedo decir nada malo de él. Tenemos custodia compartida y aunque en algunos casos chocamos por nuestro carácter, nos llevamos relativamente bien, porque yo también tengo lo mío».
Atractiva y siempre con una sonrisa, confiesa que no tiene pareja. «El patio está muy mal. Ni siquiera salgo de tardeo por Santa Catalina o el Passeig Mallorca. Soy más de salir a comer y tomar alguna copa con un pequeño grupo de amigas. Quizás cada vez soy más exigente y tengo mayor filtro con los hombres, pero ahora mismo estoy entregada a mi hija».
Anécdota
Hace pocas semanas, Ivana Icardi volvió a ser noticia a causa de que el BOE la confundió con Ivana Andrés, una de las capitanas de la selección que ganó el Mundial femenino de fútbol con España, y figuraba en el listado en el que se otorgaba la Medalla de Oro al Mérito Deportivo, concedida por el Ministerio de Cultura y Deportes. «Me encontraba en Brasil cuando empecé a recibir un centenar de whatsapps y llamadas de periodistas». Una historia que unió a las dos jóvenes y terminó en anécdota.