Este verano, especialmente en el mes de agosto, hemos podido apreciar muchos fenómenos astronómicos como es el caso de las Perseidas y dos superlunas, una tuvo lugar a principios de mes y la otra aparecerá a finales. Para los amantes de la astronomía aquí te dejamos todos los detalles para disfrutar de la superluna azul. En cuanto a los mejores sitios para verla en Mallorca están Cala Mesquida, Lluc, la Colònia de Sant Jordi o Cabo Blanco, ya que son zonas donde predomina la oscuridad por las noches. Sin embargo, hay una gran variedad de sitios en la Isla a los que se puede acudir para observar este gran fenómeno astronómico, lo más importante es que estén situados en una zona donde no haya contaminación lumínica.
La luna es el único satélite natural de la Tierra y el quinto más grande del sistema solar. Lo normal es que solo sea luna llena una vez al mes debido a que el ciclo lunar se completa a los 29 días, pero aproximadamente entre dos y medio y tres años se dan 13 lunas llenas al año. Eso equivale a un total de 37 veces cada siglo. A esta superluna se la conoce como luna azul y se podrá ver el próximo 31 de agosto. En 2020 también tuvo lugartanto a principios como a finales de mes. El evento más conocido después de las superlunas es la reina de las lluvias de estrellas que sucede durante las noches del 12 y 13 de agosto, es muy intensa y se puede llegar a ver hasta 60 meteoros por hora. Siguiendo con el 18 de agosto, que se vieron el pico de las Kappa-Cígnidas, una lluvia de estrellas que ocurre del 3 al 25 de agosto.
Por otro lado, la superluna azul de finales de agosto se encontrará más cerca de la órbita elíptica a la Tierra. Será visible en la mayor parte de todo el mundo y en España alcanzará su máximo apogeo a las 3.36 hora peninsular. Se podrá ver desde que aparezca en el horizonte (orto) a las 21.25 horas y hasta que se ponga (ocaso) a las 7.51 horas. Para poder disfrutarla mejor, los expertos recomiendan ubicarse en zonas que no cuenten con demasiada iluminación. La siguiente la podremos apreciar el 29 de septiembre, ya en otoño, siendo así la cuarta superluna y última del año.