La calle General Ricardo Ortega, llamada por algunos de sus vecinos ‘la calle del olvido', vuelve a ser noticia: en dos días, han cortado un árbol que, ubicado frente al número 49, estaba levantando la acera y el bordillo, y además existía el peligro de que se pudiera caer, y han podado las ramas de otro, sito frente al número 51, esquina Manuel Azaña, a la vera del párking del cuartel de la Guardia Civil. Con anterioridad a la poda, habían llegado los servicios de Emaya, que tras levantar la tapa de un imbornal, observaron que parte de los desagües de dicha calle habían sido invadidos por las raíces de los árboles, obstruyéndolos, lo que supone otro problema.
¡Reforma integral, ya!
Dicha calle, nos recordó Ligia Lilibeth, empresaria, con negocio abierto en la misma –ayer, cerrado a causa del corte y poda de los dos árboles– y portavoz de la zona en los plenos de Cort, que la reforma integral del resto de la calle, que es el tramo comprendido entre Joan Alcover y Manuel Azaña, está aprobada en el pleno del pasado mes de marzo, «por lo tanto –señaló–, confiamos en que el alcalde, Jaime Martínez, ordene el inicio de las obras, y no haga como el anterior, que la dejó a medias, teniendo que pagar los vecinos las consecuencias: aceras en pésimo estado, lo que ocasiona caídas de gente mayor, algunas con lesiones óseas graves, desagües atascados, como se ha demostrado ahora tras el análisis de los mismos llevado a cabo por Emaya, árboles de los que constantemente caen ramas sobre los coches, entre ellos algunos abandonados… En fin, que esta calle, tal como está ahora, es un desastre. Una vergüenza. Un agravio comparativo con el resto de la calle… Por ello le pedimos al nuevo alcalde que actúe, pero ya».
Ligia quiere agradecer a los vecinos que levantaron su voz cuando los dos trabajadores de Infraestructuras llegaron con la orden de solo podar el árbol. Ante la insistencia de estos, de que el árbol estaba mal por lo que podía caerse, uno de ellos llamó a su jefe, y tras explicar las condiciones en que se encontraba, reseco, con muchas posibilidades de caerse, le dieron luz verde para que lo cortaran. Mientras tanto, agentes de la Policía Local acotaban la zona y dirigían el tráfico. Por tanto, la tarde se saldó con un árbol cortado casi de raíz, otro podado, una acera completamente destrozada, y con el descubrimiento de que raíces de los árboles habían invadido los desagües. ¡Casi nada, eh...!
Por ello, no hay otra solución que la de ponerse manos a la obra y remodelar ese tramo. ¡Pero ya! Los vecinos, defraudados con el anterior Ajuntament, que incomprensiblemente no lo hizo, tienen puestas sus esperanzas en este. Además, esta reforma parcial está aprobada, como aprobado está el presupuesto de la misma.
Pues ya era hora
Hace una semana publicamos la foto de la rotonda que hay cerca del Conservatori de Música, donde estuvo colocada la escultura en homenaje a los Donantes de sangre, que una mala noche de hace casi un año saltó por los aires al colisionar un coche contra ella.
Si mal no recordamos, como pie de foto le sugeríamos tres cosas a quien corresponda de Cort: que quitara el cubo de pintura de color azul, perdido entre las piedras, y la bolsa de color verde, conteniendo basura, ubicada en el otro extremo, que estaban ahí desde hacía meses, y que, ya puestos, retirara los pedruscos que fueron peana de dicha escultura, y que una vez limpia la parcela, la sembraran con césped y plantaran en ella algún árbol, como los que hay en la rotonda de enfrente.
Bien, pues la bolsa de basura y el cubo han sido retirados, ¡aleluya!, ahora solo falta retirar las piedras, o si no, con ellas reconstruir la peana y colocar sobre ella la escultura de los Donantes de sangre, o si la han colocado en otro sitio, otra, además de plantar los árboles, con lo cual el lugar saldrá ganando en todos los aspectos.
Por otra parte, hay que añadir a esta buena noticia, otra: que el estanque sin agua que hay al lado de la rotonda, y que estaba convertido en un pequeño vertedero de basura y hojarasca seca, también ha sido limpiado, lo cual es de agradecer. Lo suyo sería que tuviera agua, pues preparado para ello está, pero los tiempos de sequía mandan. Ahora de lo que se trata es de no ensuciarlo… Y de limpiarlo más a menudo de como se hacía hasta ahora.
Salir para entender
Está visto que este Ajuntament quiere hacer bien las cosas... Aunque aún queda mucho por hacer. Por ejemplo: tras meternos en la piel de una persona que viva, trabaje o tenga que pasar por el Passeig Marítim, entendemos que no debe ser fácil su día a día, y más no sabiendo cuándo van a terminar las obras. También, metidos en la piel de la persona que ha de tomar el autobús en el Molinar, o Portopí, es desesperante ver pasar los autobuses llenos de usuarios diarios más turistas. Por eso decimos que el político debe de salir, subirse al bus, hablar con la gente, ver...