La Estación Naval de Portopí acoge este fin de semana a una docena de buques de guerra y 600 efectivos, pertenecientes a ocho países de la Alianza Atlántica, en el mayor ejercicio contraminas del Mediterráneo.
Integrados en el dispositivo Spanish Minex 21, disfrutarán de unos días de descanso en Palma, antes de reemprender las maniobras, que comenzaron el pasado día 26 de abril en Menorca y finalizarán el próximo 7 de mayo.
Esta fuerza naval se constituye de forma periódica con el propósito de coordinar los procedimientos de defensa de la OTAN en la detección y desactivación de minas. Está formada por la Agrupación permanente de cazaminas de la Alianza Atlántica y la Fuerza Marítima Europea, al mando del capitán de navío Miguel Cuartero. En este ejercicio se suma también un submarino, un avión y un helicoptero.
Su presencia en Portopi evoca los tiempos en que fue base permanente de los dragaminas de la Armada, ahora con base en Cartagena y que el pasado día 25 de abril celebró precisamente el 75 aniversario de su fundación. En la actualidad los cazaminas de la clase Segura, dotados de sonar de profundidad variable y minisubnarinos para la desactivación de artefactos explosivos, constituyen la escuadrilla destinada a esta fuerza naval en la Armada española, imprescindible para asegurar el tráfico marítimo en tiempos de crisis militares.