En el Club Hípico La Gubía, en sesiones de mañana y tarde, se celebró este domingo el II Concurso Nacional de Volteo, una disciplina hípica que requiere determinadas cualidades, tanto de equitación como de gimnasia rítmica, con la particularidad de que ésta se hace a lomos de un caballo al trote – ya sea de forma individual, ya sea con otros jinetes– lo cual requiere muy buena condición física y una completísima sincronización con el caballo, al que hay que cuidar por encima de todo lo demás, pues cualquier cosa que se le haga, y que le incordie o haga sufrir, puede suponer la descalificación del jinete.
Participar en en esta competición ya da el pase para disputar el Campeonato y la Copa de España, que se celebrará en esta hípica, en junio.
El Volteo es un conjunto de ejercicios espectacularmente vistosos, en el que la pericia de los jinetes -más mujeres que hombres-, a veces en solitario, a veces en pareja, a veces en trío, hacen figuras sobre el caballo en movimiento, que de no ser por la buena técnica que poseen y el saber combatir la fuerza de la gravedad, no lo conseguirían.
Por supuesto, en todo esto juega una baza importante el caballo, entrenado para esta competición, y la Longeur, la mujer que a través de la cuerda con el que le lleva sujeto, hace que camine y galope dando círculos sin que las jinetes que lleva a lomos le supongan ningún problema.