Buscar en Internet cómo curar una enfermedad. Buscar remedios caseros para poner fin al problema. Hacer una búsqueda en Google para encontrar un método que nos ayude en el que momento que lo necesitamos en una de las costumbres más extendidas hoy en día. Sin embargo, es un gran error. La solución debe ser siempre acudir a un especialista.
Muchas de las soluciones que se encuentran en la red no son de profesionales y, por tanto, puede llegar a ser peligrosas. En las últimas semanas varias influencers han recomendado a través de las redes sociales que las mujeres se introduzcan ajo en las vaginas para curar infecciones. Los especialistas lo descartan y alertan del peligro.
La ginecóloga norteamericana, Jennifer Gunter, ha alertado de esta practica en su cuenta de Twitter. Explica que «los ajos contienen alcina y esto puede hacernos creer que tiene propiedades antibacterianas. Esto está en un laboratorio, ni siquiera en ratones. Sólo un plato de células. Tu vagina no es un plato de células».