Javier es un pequeño gran luchador. Su enfermedad le obligó a pasar bastante tiempo en la habitación de un hospital, a pesar de su corta edad, y desde su ventana veía pasar muchos helicópteros.
Su sueño era recuperarse y tener salud para, algún día, poderse montar en uno de esos aparatos que surcan el cielo, y ahora, una vez que ha podido vencer a la enfermedad, la Guardia Civil ha cumplido con su parte.
En un vídeo, publicado en los perfiles en redes sociales de la Benemérita, se muestra el momento en que Javier, emocionado y acompañado de sus familiares, emprende el camino por la pista de aterrizaje y se sube a la aeronave.
Muy bien sentado, predispuesto y obediente, le colocan los auriculares y le bajan la mascarilla para retirarle el chupete, poco antes de que el helicóptero alce el vuelo para dar cumplimiento a su sueño. Un gesto humano que dignifica la labor de los que velan por nosotros y habla por sí mismo.