Un telescopio del observatorio Chime, en la Columbia británica de Canadá, ha descubierto unas extrañas señales de radio provenientes de una lejana galaxia, a unos 1.500 millones de años luz de distancia, un misterio astronómico en el que trabajan los expertos para resolver su origen.
Según ha informado la BBC, este hecho solo se había detectado con anterioridad una vez. En concreto, entre las 13 ráfagas de radio rápidas -conocidas como FRB- detectadas en los últimos meses se encontraba «una señal repetitiva muy inusual, proveniente de la misma fuente».
«Saber que hay otro (evento sonoro) sugiere que podría haber más por ahí», declaró una de las astrofísicas del equipo interdisciplinar de la Universidad de British Columbia (UBC), según recoge el citado medio público británico.
Este trabajo, publicado en la revista 'Nature', se ha servido de cuatro grandes antenas semicilíndricas de 100 metros de largo que exploran a diario el cielo del hemisferio norte.
Esta instalación astronómica se puso en marcha hace tan solo unos meses, y desde el primer momento detectó varias de esas explosiones de radio, incluida entre ellas la repetitiva y más misteriosa.
Las teorías que explican esta realidad empírica son variopintas. Algunas se centran en que el origen es una estrella de neutrones con un campo magnético especialmente robusto que gira muy rápido. Otras apuntan a la fusión de dos estrellas de neutrones y unos pocos científicos afirman que son emisiones provenientes de «alguna forma de nave espacial alienígena», según afirma la BBC.