La ofrenda floral a la Mare de Déu de la Salut, patrona de Palma, congregó este jueves a unas doscientas personas, según Miguel Ángel Colom, al frente de la organización, en la tradicional romería desde la plaza Berenguer de Palou hasta la iglesia de Sant Miquel. Unas veinte asociaciones de vecinos, precedidas por dos xeremiers, seguidos por la Asociación ayuda social y vecinal Bons Aires-Arxiduc y los vecinos de es Fortí, continuaron el recorrido por la calle Oms en dirección a Sant Miquel y su parroquia.
Las casas regionales participantes, entre ellas una de Chile, lucieron sus trajes regionales, muchos de los cuales iban con una flor en la mano.
Frente al templo celebraron unos bailes al son de las xeremies. Allí, en su interior, realizaron la ofrenda de flores y frutas en presencia del alcalde de Palma, Antoni Noguera, y una representación de los miembros de la oposición del PP y Ciutadans.
Finalizado el acto religioso, en la plaza Berenguer de Palou la Unió Musical Sa Nostra Terra ofreció un concierto que precedió a un gran sopar a la fresca con pa amb oli y bebida.