Se han cumplido las peores previsiones y el vertido de petróleo ha llegado a la costa de Corea del Sur, cercana a una reserva natural en el oeste de la nación. Por ello, los trabajadores trabajaban ayer sin descanso con espumaderas y vallas de contención para limpiar el peor vertido de petróleo en la historia del país.
Varias zonas de los aproximadamente 17 kilómetros de costa afectados, a unos 100 kilómetros al suroeste de Seúl, han sido ya teñidos de negro por el petróleo, según la guardia costera.
Durante el día de hoy se espera que lleguen más manchas a una zona en la que hay granjas marinas y cultivos de ostras. No obstante, el responsable del equipo de Información y Política de Supervisión del Ministerio de Asuntos Marinos y de Pesca, Song Myeong-dal, destacó que están «tomando todas las medidas para evitar que eso ocurra».
Una superficie oleosa de 20 kilómetros se ha extendido desde el buque cisterna registrado en Hong-Kong que el viernes comenzó a filtrar unas 10.500 toneladas de crudo, después de que una barcaza que transportaba una grúa chocara contra él y agujereara su casco mientras estaba anclado frente al puerto de Daesan, a unos 110 kilómetros al suroeste de Seúl.