El Grup d'Estudis de la Naturalesa (GEN) interpuso el pasado 16 de diciembre una denuncia penal contra la Conselleria d'Obres Públiques, Habitatge i Transport del Govern, la Conselleria de Patrimoni de la máxima institución pitiusa y la unión temporal de empresas Miquel Arrom Bibiloni (MAB)-Rubao, encargada de las obras del segundo cinturón de ronda. La asociación ecologista acusa a estos organismos y a la entidad adjudicataria de los trabajos de prevaricación y falsedad documental continuada, de dejadez de funciones y de delitos contra el Patrimonio Histórico por la destrucción de diferentes yacimientos arqueológicos y bienes patrimoniales y parte de un Bien de Interés Cultural (BIC) en las obras de desdoblamiento del segundo cinturón. En concreto, el GEN se refiere a parte del Camí Vell de Puig d'en Valls, una cisterna púnicoromana y otras estructuras, la necrópolis rural romana, un tramo de aproximadamente 20 metros de un acueducto romano, un edificio de época púnica, una sitja, y el yacimiento arqueológico de Can Sifre.
El presidente del GEN-GOB de Eivissa, Juan Carlos Palerm, afirmó ayer «que lo que está ocurriendo en el segundo cinturón de ronda es un auténtico expolio». Los ecologistas confían en que su denuncia será tenida en cuenta y en que se llegue a tiempo para poder evitar la destrucción de otros yacimientos arqueológicos. El GEN decidió incluir en la denuncia a Govern y Consell por considerar que no tuvieron en cuenta las continuas denuncias presentadas por el grupo ecologista y no tomaron medidas para defender el patrimonio.