El Programa Mundial de Alimentos (PMA) anunció ayer la interrupción del suministro a 6'5 millones de norcoreanos, debido a la falta de fondos a disposición de esta agencia de Naciones Unidas. «La ONU sólo podrá alimentar a 100.000 personas -75.000 embarazadas y 8.000 huérfanos- en febrero y marzo. La situación es dramática», señaló Masood Hyder, representante del PMA en Pyongyang. Esta agencia, que comenzó a suministrar ayuda humanitaria a Corea del Norte en 1995, no recibe cargamentos de cereales desde septiembre de 2003.
Según el representante del PMA, «Corea del Norte se encuentra sumida en una crisis de alimentos de consecuencias imprevisibles. Mujeres embarazadas, niños y ancianos únicamente reciben la mitad de la ración diaria mínima necesaria para sobrevivir».
El país, que ha recibido más de 10 millones de toneladas en ayuda humanitaria en los últimos nueve años, depende de la ayuda alimentaria y de la energía procedente de países del exterior.