EUROPA PRESS-PASADENA
El robot estadounidense 'Opportunity' se posó ayer con éxito sobre
una planicie de Marte, cerca de un filón rocoso, y emitió una
«fuerte señal», lo que devolvió el entusiasmo a los ingenieros de
la agencia espacial estadounidense (NASA, de sus siglas en inglés)
tras los problemas del robot 'Spirit', que ya no funciona con
normalidad. Poco después, las primeras imágenes del Planeta Rojo
tomadas por el robot empezaron a llegar a la Tierra.
«¡Qué noche!», exclamó el jefe de la NASA, Sean O'Keefe, antes de abrir una botella de champán durante una rueda de prensa improvisada en una sala invadida por ingenieros de la misión Mars Exploration Rover, en el Jet Propulsion Laboratory de la Nasa en Pasadena (California).
El director del Jet Propulsion Laboratory, Charles Elachi, hizo después una broma al jefe de la NASA. Anunció a los periodistas un gran descubrimiento y mostró una imagen de un robot sobre Marte y de un pastel sobre el cual estaba escrito «Feliz cumpleaños Sean». El cumpleaños del jefe de la NASA Sean O'Keefe es dentro de dos días.El robot se posó a las 6:05 (hora peninsular española) de ayer en una planicie, el Meridiani Planum, y casi inmediatamente envió una señal indicando que estaba en condiciones de desplazarse, anunciaron los responsables de la misión.
Tras un viaje de 456 millones de kilómetros desde la Tierra, el descenso hacia el Planeta Rojo se desarrolló sin contratiempos. El artefacto entró en la atmósfera marciana seis minutos antes de posarse y utilizó un paracaídas para frenarse en el descenso. Luego, cuando se encontraba a punto de llegar a la superficie, encendió sus motores e infló las bolsas de aire para amortiguar la caída.