La secretaria de Movimientos Sociales y Relaciones con las ONG del PSOE, Leire Pajín, insistió ayer en la necesidad de que el Gobierno elabore un Plan Nacional de Educación y Atención a la Sexualidad Juvenil. Se estima que en el año 2002 hubo unas 18.000 menores se quedaron embarazadas, unos datos que los socialistas no han dudado en calificar de «muy preocupantes».
El PSOE ya presentó hace un año una proposición no de ley en la que instaba al Ejecutivo a llevar a cabo una iniciativa para frenar los embarazos no deseados. En su opinión, los responsables del PP, «ignorando el problema», han contribuido a que la cifra de embarazos en adolescentes se haya duplicado en la última década.
Aunque Pajín aplaudió la inciativa de la ministra de Sanidad, Ana Pastor, que presentó el lunes una campaña publicitaria de prevención de embarazos no deseados, cree que no es suficiente, sino que tiene que acompañarse de medidas de más calado.
Así, recordó que en el Plan Nacional de Educación y Atención a la Sexualidad Juvenil solicitado por el PSOE, se reclamaba, entre otras actuaciones, potenciar la formación de las familias, jóvenes y profesionales sobre el abordaje adecuado de la sexualidad y la prevención de riesgos asociados.
Asimismo, abogaba por el desarrollo de programas de Educación Afectivo-Sexual en el ámbito escolar y fuera de éste.