La ministra de Ciencia y Tecnología, Ana Birulés, aseguró ayer que la futura Ley de Servicios y Sociedades de Comercio Electrónico, más conocida como ley de Internet, que se aprobará el próximo viernes en Consejo de Ministros, «respeta los derechos fundamentales porque sólo va dirigida a las actividades que tienen efectos económicos». Birulés agregó que con esta ley se evitará que Internet se convierta en «una isla fuera de la legislación de la que nos hemos dotado», y aseguró que es un mundo especial «donde no podrían intervenir las asociaciones de consumidores ni los tribunales».
La ley de Internet, según Birulés, asegura unos mecanismos de defensa jurídicos y de seguridad para los propios ciudadanos y las empresas y establece que sólo un juez puede cerrar una página 'web'. La ministra indicó que el uso de Internet en las escuelas se ha convertido en un instrumento educativo al igual que se utilizan «las tizas, el encerado, el papel y el lápiz». En España existen 7'1 ordenadores por cada 100 alumnos, datos alejados de la media europea que cuenta con 11'9 ordenadores por el mismo número de alumnos, informó.
En su opinión, el número de escuelas conectadas a Internet está por encima de la media europea, pero «será necesario incrementar el número de ordenadores por alumno», para lo cual se mantienen contactos con el Ministerio de Educación y las autonomías «en un intento de fomentar un proyecto que estará cofinanciado por el Ministerio de Ciencia».