La responsable de Comerç, Mercats, Empresa i Consum en el Ajuntament de Llucmajor, Juana María Mas Tomás (VOX) entregó este martes su acta de regidora. Si bien desde el partido de extremaderecha y del propio ayuntamiento alegaron «motivos personales», la dimisión de Juana María Mas se formaliza un día después que la regidora se viera involucrada a una agresión a su expareja en plena calle en s'Arenal.
Los hechos ocurrieron sobre las 19:45 horas del lunes cuando un vecino alertó a la Policía Local al presenciar una fuerte discusión con alboroto. El altercado se originó cuando la hasta ahora regidora de Comercio se encontró con su expareja en plena calle y, tras entablar una discusión con este, la regidora de VOX le propinó «empujones y lo zarandeó», según explicaron este martes diversas fuentes consultadas.
Los agentes de la Policía Local, al recibir la alerta por parte de los vecinos, se personaron en el lugar de los hechos e identificaron tanto a Juana María como a su expareja. Ambos se han separado recientemente. Los agentes tomaron parte de lo ocurrido y pidieron al expareja si quería denunciar los actos, a lo que él se negó.
Pese a no haber denuncia por parte del agredido, la acción se investigará de oficio por violencia doméstica tras el acta policial.
Juana María Mas ocupaba el tercer puesto de la lista de Vox en el Ajuntament de Llucmajor y, tras el pacto de gobierno entre PP-Vox y ASI, ella ocupó las carteras de Comerç, Mercats, Empresa y Consum. El próximo de la lista es Juan Manuel Piñeiro.
La renuncia se trasladará en el pleno ordinario de este miércoles para su conocimiento y, en el momento que se dé el visto bueno, se solicitará a la Junta Electoral Central las credenciales del nuevo edil para que tome posesión de su acta en el pleno del mes de julio, según explicaron ayer desde el propio Ajuntament a través de un comunicado en el que recordaron que dicha renuncia era por motivos personales. Por su parte, Vox también emitió ayer un comunicado en el que mostraba su agradecimiento a la concejal y reiteró «su compromiso inquebrantable» con Llucmajor.
Esta es la tercera dimisión que se produce en el Ajuntament llucmajorer en solo un año de legislatura. Así lo recordó el máximo responsable de Llibertat Llucmajor, Alexandro Gaffar, que lamentó la situación y aseguró que «con tanta dimisión, es difícil que la alcaldesa pueda llevar el gobierno de manera estable», señaló.