El duque de Lugo, Jaime de Marichalar, recibió anoche el alta médica y salió del Hospital Gregorio Marañón, donde fue ingresado el pasado día 22 de diciembre tras sufrir una isquemia cerebral que le provocó una hemiplejia de la parte izquierda de su cuerpo. El duque de Lugo abandonó el hospital poco antes de las 21 horas en el asiento delantero de un automóvil en el que iba también su esposa la infanta elena sentada detrás.
Jaime de Marichalar, vestido con traje, sonrió a las personas que estaban a la puerta del centro hospitalario, entre las que se encontraban medio centenar de representantes de medios de comunicación. El duque de Lugo proseguirá el tratamiento médico y rehabilitador en su domicilio, según el último parte médico, que asegura que el único daño que mantiene tras su isquemia cerebral es una «debilidad de sus miembros izquierdos».
«El duque de Lugo -prosigue el parte- tiene preservadas sus funciones corticales superiores, incluido el lenguaje, por tanto el único daño neurológico que persiste, como consecuencia del infarto cerebral padecido el 22 de diciembre pasado, es una debilidad de sus miembros izquierdos (hemiparesia), que evoluciona favorablemente». En la última semana el estado de salud de Jaime de Marichalar ha evolucionado de forma favorable y el miércoles mismo fuentes de la Casa del Rey informaron de que ya hablaba «con toda normalidad» y se encontraba bien de ánimo.