El presidente del Gobierno, José María Aznar, rechazó hoy retirar la Ley Orgánica de Universidades (LOU), que mañana comienza a debatir el Pleno del Senado, y consideró «una pura y lisa falsedad» las críticas recibidas, mientras los estudiantes volvieron a movilizarse en distintas capitales. Ante el Pleno del Congreso, en respuesta al coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, sobre la posibilidad de que el Gobierno retire la LOU, Aznar consideró que es una norma imprescindible para mejorar la calidad de la Universidad y dijo que las críticas contra la ley no son una alternativa suficiente a un proyecto aprobado por el Congreso.
Según Aznar, se está faltando a la verdad con críticas como que con la ley se quiere privatizar la universidad pública, se recortan las becas o se reduce el presupuesto. Tres imputaciones que son «una pura y lisa falsedad», aseveró. Llamazares pidió a Aznar que respete la autonomía universitaria que garantiza la Constitución y no califique de «líos» las peticiones ciudadanas expresadas en las recientes manifestaciones contra la ley universitaria.
Entretanto, unos 2.000 estudiantes -según las organizaciones convocantes- se concentraron frente a la sede del PP en Madrid para protestar contra la LOU y pedir al presidente del Gobierno que asuma personalmente las negociaciones. En las capitales castellanoleonesas de Valladolid, Salamanca y Segovia unos 5.000 estudiantes universitarios salieron a las calles en señal de protesta. La más numerosa fue la de Salamanca donde unos 3.000 universitarios, según fuentes de la organización, recorrieron varias calles y terminaron con una concentración en la Plaza Mayor, con gritos contra la ministra de Educación, Pilar del Castillo, y el alcalde de la ciudad, Julián Lanzarote, por su apoyo a la ley. En Alacant, algo más de un millar de estudiantes se manifestaron contra una ley que supone «un ataque a la concepción pública de la Universidad».