El presidente del Gobierno, José María Aznar, reconoció ayer que el Gobierno está dispuesto a «hacer mejoras» técnicas al proyecto de Ley de Ordenación Universitaria (LOU) antes de que quede cerrado su trámite parlamentario, siempre que no se «desvirtúe» el «planteamiento de fondo» de la reforma. «Estamos dispuestos a hacer mejoras desde el punto de vista del perfeccionamiento técnico, pero, como es normal, nada que pueda desvirtuar lo que significa el planteamiento de fondo de la Ley», matizó.
Así, Aznar adujo que, en su opinión, la nueva Ley impulsada desde el ministerio que dirige Pilar del Castillo contempla medidas «bien definidas, bien planteadas y que gozan de un amplio respaldo». «Han sido bien dialogadas "puntualizó". Además, estamos dispuestos a mejorarla de aquí a que acabe el trámite parlamentario, en la medida oportuna, siempre y cuando tenga que ver con el fondo del proyecto».
Sin embargo, aprovechó su comparecencia para advertir que su Gobierno «no se dedica a satisfacer a nadie porque grite más o grite menos», en clara alusión a las manifestaciones de protesta que han tenido lugar en las últimas semanas, sino a «atender a las necesidades de la Universidad española».