Un nuevo tratamiento anticonceptivo para hombres ha empezado a ser probado en el Reino Unido y promete convertirse en una solución fácil para evitar embarazos indeseados. El tratamiento, desarrollado por los laboratorios Organon, consiste en la inserción subcutánea en el brazo de minúsculas tiras del nuevo medicamento anticonceptivo, que se calcula puede ser eficaz durante tres años en el bloqueo del esperma.
La sustancia, llamada «etongestrel», que es una forma de la progesterona, ha sido insertada en 40 británicos para comprobar su eficacia y los laboratorios esperan que podrán comercializarla hacia el año 2005. La misma fórmula está también a prueba en forma de píldora anticonceptiva para hombres y ambos tratamientos deben estar acompañados de una inyección de testosterona cada cuatro o seis semanas para asegurar su eficacia.