La comisión mixta para el estudio y análisis de la evidencia científica sobre ensayos con heroína y sus aspectos sanitarios, éticos y sociales aprobó un dictamen que permite los ensayos con heroína en drogadictos, dado que además no existen impedimentos jurídicos para llevarlo a efecto.
El dictamen de la comisión, que fue creada por el Gobierno en abril de 1999, señala que no se dispone de evidencias científicas de que la prescripción de heroína sea una forma efectiva de tratamiento, pero se considera que no se han realizado los experimentos necesarios para poder validar o no esta afirmación, por lo que se aceptan.
Este dictamen, difundido tras la reunión de ayer, indica que los ensayos clínicos con heroína deben realizarse en centros e instituciones que tengan una calidad asistencial estrictamente acreditada y señala que éstos deberán ser dirigidos por investigadores experimentados en el tema de las drogodependencias.
Existirá un adecuado grupo de control, con asignación aleatoria
de los participantes a las distintas modalidades de
tratamiento.
El diseño del ensayo clínico, prosigue el dictamen, involucrará a
un número suficiente de participantes, para poder obtener
conclusiones consistentes. Deben ser ensayos multicéntricos. Los
criterios de inclusión obligarán a evitar la autoadministración
intravenosa de heroína, en aquellos participantes que utilicen
otras vías en su consumo habitual. No se preverá tratamiento
compasivo alguno tras la finalización de las investigaciones.