Un 13 por ciento de los españoles es partidario de que no les ponga ningún obstáculo legal a los inmigrantes para entrar en España, según los datos del barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas del mes de febrero, que también asegura que un 83 por ciento de los españoles no tendrían ningún problema si un inmigrante fuera compañero de trabajo suyo o de su hijo en el colegio.
Según esta misma encuesta, ha aumentado la preocupación por el paro, que está en primer lugar, mientras que el terrorismo pasa al segundo puesto. Los españoles no somos tan tolerantes como parece. A pesar de que un 83 por ciento de los encuestados confiesa no tener ningún problema en que un compañero de colegio de su hijo o un colega suyo de trabajo sea un inmigrante, no todos son recibidos igual.
Para empezar, una gran mayoría (el 79 por ciento) es partidaria de que entren inmigrantes que tengan una mínima garantía de estabilidad, mostrándose partidarios de que sólo lleguen los que tengan un contrato de trabajo. Sin embargo, las reticencias no se quedan en los aspectos meramente administrativos. Los españoles apuestan claramente por la inmigración procedente de países sudamericanos.
Por otra parte efectivos de la Guardia Civil, en colaboración con Salvamento Marítimo Español interceptaron durante la madrugada y la mañana de ayer frente a las costas de Tarifa (Cádiz) a un total de 188 inmigrantes subsaharianos y marroquíes que viajaban en cinco pateras. De los 188 inmigrantes, 130 eran magrebíes, entre ellos tres mujeres; mientras que las 58 personas restantes son de procedencia subsahariana, todos hombres excepto nueve mujeres.