Los principales accesos al centro histórico de Valldemossa ya están controlados por cámaras. Si bien los dispositivos de vigilancia se instalaron hace tiempo, no ha sido hasta la semana pasada cuando se activaron. El objetivo de esta medida impulsada por el Ajuntament es pacificar el tráfico que existe en el centro, unas calles que si bien están declaradas como Acire desde hace años, no había un control específico sobre quien circulaba. Ahora, las cámaras registrarán los coches que acceden al núcleo histórico.
De momento ya están en marcha las cámaras de las calles Blanquerna (de acceso desde Deià), la calle Marquès de Vivot y la calle Filoses. Lo que permite controlar los principales puntos de acceso. Además, desde el Consistorio señalan que hay otros dos dispositivos también instalados pero todavía no están operativos. «La Policía Local será la encargada de controlar las cámaras y se fijarán sanciones a los infractores», apuntaban ayer desde el Ajuntament.
Por su parte, los vecinos de la zona afectada pueden solicitar permisos y sus vehículos podrán circular con normalidad. También el Consistorio ha habilitado un número de whatsapp y se pueden pedir permisos especiales para circular. Además, durante la franja horaria de las 8 a las 11 horas, los camiones podrán abastecer a los comercios en las zonas de carga y descarga. «El objetivo es controlar los accesos en el centro histórico debido a la cantidad de turistas que recibimos y así poder dar una mayor pacificación», añaden. Otros municipios como Santanyí también estudian instalar cámaras de vigilancia con el objetivo, en este caso, de garantizar la seguridad en determinadas zonas.