El ambicioso y tantas veces postergado proyecto de renovación de los balnearios de la playa de Alcúdia será sufragado de manera íntegra con fondos europeos. El Ajuntament d'Alcúdia ha sido informado de que recibirá una subvención de 4 millones de euros procedentes de la línea Next Generation de la Unión Europea, una cantidad que cubre la totalidad de la obra, cuyo presupuesto ronda esta cifra.
Así lo ha asegurado la alcaldesa de Alcúdia, Fina Linares, quien ha mostrado su satisfacción porque se trata de uno de los proyectos más complejos de esta legislatura, y que se viene arrastrando desde hace años, hasta el punto de que la Demarcación de Costas ya ha concedido cuatro prórrogas de un año al Consistorio para hacer las obras, que no estarán listas al inicio de la temporada turística. El Ajuntament d'Alcúdia tiene como límite para finalizar los nuevos balnearios el 1 de noviembre, por lo que no las obras continuarán durante todo el verano y no estarán listas hasta finales del mismo. El proyecto cuenta con la oposición del GOB, que considera que no se cumple la Ley de Costas.
Características
Los nuevos balnearios serán muy distintos a los anteriores que han sido demolidos en la primera fase de las obras. Estos daban la espalda al paseo peatonal paralelo a la playa y según recoge la memoria del proyecto, no invitaban a entrar desde este paseo y, a la vez, se veían oscuros desde la parte que da al mar. Los nuevos balnearios se ha planteado tendrán acceso indistintamente desde la playa como desde el paseo, buscando «que sea atractivo desde ambos lados e invitando a los posibles clientes a entrar». De este modo, se pretende favorecer el acceso del público en primavera, otoño y días de buen tiempo en invierno, cuando la playa está más vacía pero el paseo sigue siendo transitado.
De hecho, el Ajuntament d'Alcúdia ya ha previsto a la hora de sacar a concurso la explotación de estos bares y restaurantes de playa, que puedan permanecer abiertos más allá de la temporada estival, para compensar que este verano no podrán generar negocio los meses fuertes del turismo.
Doble acceso
Para lograr este efecto, los nuevos balnearios de la playa serán más largos y bajos que los anteriores. Medirán 27 metros de largo por 6,6 m de ancho y 4,5 m de altura, serán de ladrillo blanco visto y tendrán en un lateral la cocina, el almacén, el cuarto de basuras y un lavabo para el personal; y en el otro lateral, los aseos públicos a los que se accederá desde el exterior a través de una tarima de madera. En el centro de cada edificio habrá un espacio hueco de 15 m de largo por 6,6 de ancho destinado a salón comedor, abierto tanto hacia la playa como hacia el paseo, de modo que permita ver el mar desde la calle y viceversa.
Completarán la estética y servicios de cada local una terraza formada por un entarimado de madera colocado directamente sobre la arena y una pérgola de acero galvanizado que sujetará cinco toldos de unos 16 m2 de superficie cada uno.
Otra de las novedades respecto a los anteriores balnearios de la playa de Alcudia es que los nuevos estarán equipados con placas fotovoltaicas para aprovechar la energía solar y reducir el consumo eléctrico de los locales, y serán cien por cien accesibles.
Además de la demolición de los viejos y nueva construcción de seis balnearios en el sector I de la playa del Port d'Alcúdia, este proyecto contempla la conexión de cada un de ellos al sistema de alcantarillado público. También está previsto renovar los accesos a la playa en este sector, de manera que «se podrá entrar en los balnearios sin pisar la arena, desde el paseo», explica la alcaldesa.