La Conselleria d'Educació y Universitats anunció este jueves la decisión de cerrar el CEIP Es Putxet de Selva, tras constatar que una zona del edificio lleva al menos cuatro años apuntalada. De ese modo y tras las peticiones de las familias, el Govern conjuntamente con el Ajuntament de Selva apuestan por reubicar a los alumnos. De hecho, tal como avanzó ayer este periódico, el Ajuntament ha ofrecido las dependencias municipales de Es Centre.
Cabe recordar que la situación estalló hace casi dos semanas, cuando tras la visita del Conseller Antoni Vera, en la que observó que el centro estaba apuntalado sin que se hubiera intervenido desde 2020, se decidió realizar una inspección el día siguiente. Fueron los técnicos del Institut Balear d'Infraestructures i Serveis Educactius (IBISEC), quienes tras dicha inspección inicial, redactaron un informe que concluye que «el edificio no presenta peligro a corto plazo».
Sin embargo, desde la Conselleria se ha decidido «trabajar para garantizar un entorno seguro para toda la comunidad educativa y estudiar la mejor solución en el edificio del CEIP Es Putxet», según explicaron ayer fuentes de la administración. En esa línea, la Conselleria ya inició ayer las gestiones para realizar el traslado del mobiliario y equipamiento del centro, así como de los alumnos, maestros y personal no docente, «de la forma más rápida y ágil posible».
Este traslado «afectará a cuatro cursos, concretamente a los de tercero, cuarto, quinto y sexto de primaria, ya que los de infantil y del primer ciclo de primaria están en un edificio de nueva construcción», detalló ayer Vera. En concreto, el traslado afecta a unos 120 alumnos. El conseller también pidió «disculpas en nombre de la Administración a toda la comunidad educativa de Selva porque, pese a que no hubiera mi equipo, no puede que en pleno siglo XXI vaya a visitar un centro y lo encuentre apuntalado».