El kilómetro y medio que unen el pueblo de Estellencs con su cala pueden convertirse en una verdadera ‘ratonera' de coches durante el verano. Si bien desde hace tiempo el Ajuntament optó por restringir el acceso a los vehículos, cada temporada alta son muchos los que hacen caso omiso a la señalización y bajan hasta la emblemática cala por una carretera estrecha donde en algunos puntos casi no pasan dos coches.
Para evitar los colapsos que se allí se creaban durante los meses de verano, el Ajuntament ha iniciado unas obras de mejora de acceso a la costa. Estas consisten en crear cuatro zonas de apartaderos, una de ellas con mayor capacidad, para poder «garantizar las seguridad», apunta el alcalde, Bernat Isern.
Los trabajos se iniciaron hace poco más de un mes y está previsto que finalicen el 15 de mayo. Además, también se ha mejorado la pavimentación en siete puntos y se mantienen los márgenes de pedra en sec. El proyecto ha sido financiado por el Consell y cuenta con un presupuesto de 150.000 euros. Pese a estas mejoras, Isern aclara que se mantendrán las restricciones y solo podrán bajar en coche los vecinos.