La decisión de la empresa Agama de bajar el precio de la leche que compra a los ganaderos de Mallorca, así como reducir en un 10 % el total de litros que adquiere a las vaquerías de la Isla ha puesto en alerta a las organizaciones agrarias que, coinciden, en que la medida puede suponer el cierre de más vaquerías. Cabe recordar que en la actualidad en Mallorca solo quedan 15 explotaciones agrarias con vacas lecheras.
Desde la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), Joana Mascaró explica que si bien en la Península la industria está bajando el precio de la leche que compra a los payeses «en Baleares esta situación no tiene sentido ya que aquí el precio que se paga al ganadero no había llegado a lo que se paga en la Península. Siempre estamos por debajo de la media nacional, por lo que no entendemos que cuando bajan los precios somos los primeros en aplicar esta reducción», añade. Mascaró –que también es ganadera y conoce muy bien el sector– alerta que esta situación puede provocar «el cierre de vaquerías que querían seguir unos años más y que ahora ven que seguir significa volver a tener pérdidas», sentencia.
Un aspecto con el que también coincide el gerente de Asaja, Joan Simonet, que añade que «si cierran las vaquerías, detrás de ellas también cerrará la industria porque una no puede subsistir sin la otra».
Simonet recuerda que Agama es la única marca de leche mallorquina y que «la industria debe tener cierta sensibilidad ya que es un ejemplo de producto local».
«Si tienen un problema de comercialización, que nos lo digan y veremos como puede resolverse el problema», añade. Simonet califica de «sorprendente» que Agama decida ahora reducir la producción «cuando estamos en el inicio de la campaña turística».
Por su parte, desde Unión de Pagesos, Sebastià Ordines, apela también a los consumidores: «Si queremos mantener un paisaje en la Isla con vacas, debemos apoyar a la leche local» ya que sin este apoyo «las vaquerías cerrarán si no se dan alternativas», sentencia.