El chiringuito de la playa de s'Oratori, en Portals Nous, estará gestionado este verano por primera vez por la misma parroquia de Portals con un objetivo solidario: dedicar parte de los ingresos a sufragar la construcción de un futuro albergue que acoja a familias necesitadas de la zona de Calvià.
El Obispado de Mallorca dispone de la concesión del chiringuito desde 1966, pero normalmente cedía los derechos para la instalación y explotación a una empresa exterior. Estos caducaron en 2021, por eso la parroquia, al detectar las necesidades de muchas familias residentes, ha decidido apostar por la explotación directa del negocio.
Economía solidaria
Las obras de acondicionamiento, al tratarse de un chiringuito desmontable, han comenzado hace unos días, y los trabajadores habituales de este establecimiento a pie de playa han sido subrogados. La idea de la parroquia es comenzar la explotación en cuanto sea posible, pero ya han decidido reducir en un hora el horario habitual para evitar molestias a los residentes de la zona.
La idea ha surgido de Pep Toni Guardiola, delegado de Cáritas Mallorca y rector de la parroquia de Portals, que ha detectado un aumento constante de los casos de familias con necesidades que precisan de una ayuda temporal. Para lograrlo, la intención es construir una infraestructura que pueda ayudarlos durante una temporada, que puede durar entre seis meses y un año, y ahora mismo no existe en el municipio de Calvià.
En este sentido, hay que recordar que este negocio ha sido muy polémico en los últimos años. En 2020, por ejemplo, la empresa que explotaba la concesión se enfrentó a varias denuncias por permitir la entrada de un número de gente superior al permitido y le obligaron a regular el aforo. Además, el Grupo de Ornitología Balear (GOB) ya presentó ese mismo año ante Demarcación de Costas un escrito para exigir el cierre del chiringuito, así como tramitar el expediente de caducidad.
La parroquia ha decidido rebautizar el chiringuito con un nombre muy bíblico: Tabgha. Se trata del escenario, según el Evangelio, en el que Jesucristo obró el milagro de multiplicar los panes y los peces para dar de comer a más de 5.000 personas que le seguían y que no tenían nada para comer.