En Bunyola hay poco más de 1.000 plazas turísticas entre establecimientos hoteleros y viviendas vacacionales y este es el número que se quiere mantener para avanzar hacia un modelo de turismo sostenible. Bajo esta premisa de sostenibilidad el Ajuntament de la localidad ha aprobado el Plan Municipal Estratégico de Turismo que pretende mejorar la gestión y promoción turística del municipio bajo una marca única y que englobe a los diferentes agentes de la localidad.
De momento el plan plantea cuatro líneas estratégicas bien diferentes que pasan por la gobernanza del destino, a la economía circular o la promoción del producto local. La regidora de Turisme, Comerç y Participació, Carmen Parra, explica que otro de los objetivos es «adecuar el destino de Bunyola tanto al turista como al residente para que haya una convivencia». Es por ello que se ha creado un Foro Municipal de Turisme con la intención que participen tanto el tejido empresarial como la sociedad civil vinculada al turismo.
La promoción de Bunyola bajo una marca única es la segunda línea de actuación con la que se contempla «crear una banco de imágenes donde se nos reconozco como marca», añade Parra. En ella se quiere potenciar el municipio como receptor de turismo sostenible y promocionando los valores naturales y culturales de que dispone.
La tercera línea se centra en la mejora del núcleo antiguo como uno de los principales recursos turísticos del municipio por lo que «debe ofrecer la mejor imagen posible al visitante». Además, también se prevé la creación de aparcamientos disuasorios para poder descongestionar el tránsito rodado dentro del núcleo urbano y facilitar el aparcamiento tanto a visitantes como a residentes. La mejora de la señalización de las rutas senderistas también está contemplada en los objetivos de trabajo. La cuarta línea de actuación es la «colaboración con el tejido empresarial para fomentar la economía circular y proteger el patrimonio cultural de Bunyola», destaca la responsable de Turismo.