«He llorado cuando me he enterado de que la antena se tenía que parar por una orden del Ajuntament». Esta fue la reacción de una de las vecinas del camí de Can Boqueta de Inca que tiene su finca pegada a la antena de tecnología 5G que el Consistorio inquer ha ordenado apagar por estar en suelo rústico y causar molestias vecinales.
Han sido meses en los que los residentes en la zona han tenido que soportar el incansable ruido de un generador que la empresa instaladora colocó en la base de la antena sin haber solicitado el permiso. Desde mayo de 2021, cuando se puso en funcionamiento la infraestructura ante la sorpresa de los vecinos que vieron como la antena se montaba en pocos días, en un extremo de una finca privada pegada a la carretera y a otras viviendas, mostraron su total desacuerdo y reclamaron la actuación del Ajuntament y de las instituciones supramunicipales. Ahora, el Ajuntament d'Inca ha ordenado a la empresa instaladora que apague la antena en un plazo máximo de 48 horas una vez reciba la notificación. Además, se enviará el caso a la Agència de Defensa del Territori por si procede actuar contra la antena y obligar a la instaladora a desmontar la estructura y restaurar el paisaje rural.
Reacciones
El alcalde de Inca, Virgilio Moreno, resalta que «nuestra función ha sido la de actuar en defensa de los vecinos que tienen que soportar el ruido del generador y tener la antena frente a sus casas». Moreno también subraya el hecho de que esta acción, pionera en un municipio de Mallorca, «obedece a la necesidad de mostrar una autonomía municipal en las decisiones urbanísticas. Las antenas de este tipo se consideran de interés general, pero lo que no puede ser es que su instalación se salte la normativa urbanística local».