Son Servera recupera el histórico proyecto de construir un aparcamiento subterráneo en la plaza Mallorca de Cala Millor para dar una solución a la falta de estacionamiento en la zona costera, sobre todo durante los meses de verano. El Ajuntament ha llegado a un acuerdo con el Consell de Mallorca por el que la institución insular redactará el proyecto. Se trata de una actuación costosa con un presupuesto que podría estar alrededor de los dos millones de euros. El coste de la redacción estaría entorno al 10 por ciento del coste total.
La alcaldesa de Son Servera, Natalia Troya (PSOE), así lo confirmó a este periódico. «Esta es la idea que tenemos. Hemos llegado a un acuerdo con el Consell para que nos haga el proyecto y una vez que lo tengamos se tratará de buscar fondos para ejecutarlo. Ésta es una primera fase».
Problemática
Cala Millor, desde hace años, padece un problema creciente de falta de aparcamiento. Año tras año se han ido habilitando diferentes zonas pero todavía hay una carencia importante en este sentido. Esta situación se agrava mucho más en verano cuando crece la población. Así la alcaldesa destacó que «estos meses llegamos a triplicar la población». Los diferentes gobiernos han intentado dar una respuesta. Ya en 2004 se hizo un estudio en el que se analizaban los vehículos que había en el centro. Por aquel entonces se cifró en una media diaria de 550 coches aparcados en el centro y se diseñó un aparcamiento, en este mismo espacio, para 952 plazas.
La situación ahora no es la misma y hay que adaptar los proyectos a la realidad. De esta manera Troya aseguró que «no podemos hablar todavía del número de plazas. Se analizará la viabilidad y posteriormente estudiaremos cómo se ha de gestionar. Todavía es pronto». Con un aparcamiento en esta zona céntrica se podrían descongestionar las calles adyacentes donde hay más coches aparcados.
Desde el departamento de Mobilitat se están llevando a cabo diferentes actuaciones para ampliar las plazas de aparcamiento. Las calles de la Llimonera y de la Dàlia de Cala Millor han pasado a ser de un solo sentido. La circulación de coches está pensada solo en sentido ascendente o descendente según la señalización. La alcaldesa destacó que este cambio «responde a la necesidad de aumentar el número de aparcamientos ya que así se permitirá estacionar en una parte de la calle, cosa que permitirá acceder más fácilmente al centro del núcleo porque se crearán unas 50 nuevas plazas. La actuación sigue con la intención de crear una movilidad más sostenible».