Vianants Mallorca, dedicada a la defensa de los derechos de los peatones, ha criticado la solución aprobada recientemente por el Ajuntament de Santa Margalida para permitir que se pueda aparcar delante de los garajes de viviendas unifamiliares. La entidad considera que «la iniciativa del alcalde, Joan Monjo, es completamente desacertada y no soluciona nada».
Las quejas de esta plataforma se refieren a la aprobación de un cambio en la ordenanza municipal para que los garajes de viviendas unifamiliares puedan optar, por el mismo precio que un vado, por la figura de la «reserva de estacionamiento» y aparcar un vehículo dentro y otro ante la puerta.
El Reglamento General de Circulación prohibe parar o estacionar delante de un vado. Vianants Mallorca apunta que «lo que se pretende es cambiar el significado a esta señal saltándose las normas. Y la Ley de Patrimonio de las Administraciones Públicas (LPAP) recuerda que el espacio público es de todos y destaca el uso común frente al uso privado». La entidad apunta que el problema de los pueblos es la falta de un transporte público digno y que «ya no se puede caminar porque las aceras son estrechas y hay mucho tráfico».