«Cuando abría la ventana podía ver la Serra de Tramuntana, pero ahora me encuentro con la antena». Esta es una de las quejas de los numerosos vecinos del camí de Can Boqueta que desde hace unos meses conviven con una antena de tecnología 5G instalada en suelo rústico.
El Ajuntament d'Inca se ha reunido con ellos y el alcalde Virgilio Moreno explica que «se ha denegado la declaración responsable que presentó la empresa porque reclamamos el plan de implantación, que no nos han entregado tras el periodo de alegaciones».
Mientras los vecinos han visto como se construía el cerramiento de la infraestructura con un vallado y hormigonado a escasos metros de sus viviendas, la empresa instaladora (que ha optado por el silencio ante Ultima Hora) se acoge a la Ley General de Telecomunicaciones que antepone la dotación de tecnología 5G a cualquier normativa urbanística.
El alcalde denuncia «la total indefensión de los ayuntamientos ante estas situaciones. Hemos hecho todo lo posible y la antena tiene la negativa del informe técnico municipal». El próximo paso será llevarlo a la Agència de Defensa del Territori, que ya denegó el uso de una antena 5G en sa Pobla, a la espera de que el Govern firme el plan de implantación.