No hubo Semana Santa, ni fiestas patronales en verano, ni ferias, ni fiestas de Navidad y, evidentemente, tampoco hubo Sant Antoni. El santo tampoco venció al coronavirus y los ayuntamientos donde se celebra con más fervor esta fiesta suspendieron todos los actos. Solo se celebraron las Completes, aunque fueron a puerta cerrada.
En Manacor solo las grandes fotos que se colgaron en los puntos estratégicos de la fiesta recordaban el bullicio de otros años y los cohetes, que se lanzaron en el momento del inicio de los actos más relevantes, recordaron la fiesta, que no se ha dejado de celebrar desde el año 1854.
A las 19.30 horas sí que se celebraron las Completes, que se emitieron de manera virtual, en la iglesia dels Dolors aunque solo asistieron al acto litúrgico la banda de música, el coro y los sacerdotes. En Porto Cristo, Sant Antoni y los Dimonis hicieron un baile virtual.
A pesar de la cancelación de todos los actos, el Ajuntament de Manacor mantuvo activo un dispositivo policial para controlar que no se produjeran aglomeraciones ni reuniones en casas particulares y se acordonó el Palau para evitar la concentración de gente.
En Artà, donde tampoco se celebraron actos a excepción de las Completes, se mantuvo el mismo dispositivo policial de los otros años. Las Completes también se hicieron a puerta cerrada y ni siquiera asistieron los miembros Obreria de Sant Antoni.
En Capdepera se celebró un pregón de los Dimonis de manera virtual y después la nada de música ofreció un concierto, también virtual. En la tarde del viernes, los vecinos hicieron sonar sus picarols desde sus ventanas y puertas.
Clamater ilustre
Los actos a puerta cerrada o virtuales también fueron la nota predominante en sa Pobla. Tras un 7 de enero sin elección del clamater, las Completes se celebraron a puerta cerrada y retransmitidas por las redes sociales. Aún así, el grito de «Visca Sant Antoni!» se pudo oír, pero en la voz de Alexandre Ballester y como acto de homenaje al cronista y dramaturgo en el inicio del año dedicado a su figura.
En Muro, otro centro de la devoción en estas fechas, el Ajuntament prestó su apoyo a colectivos particulares que desarrollaron actos de manera virtual.