Las negociaciones mantenidas por el alcalde, Carlos Simarro, con la propiedad del campo de deportes Infante Lois para rebajar el coste de la expropiación que el TSJB ha fijado en 6,9 millones de euros, no han prosperado. Al consistorio de Sóller le quedan todavía por pagar 5,3 millones más los intereses de demora. Por este motivo el alcalde ha presentado una alegación a la modificación de los presupuestos municipales que se aprobó hace un mes y que habilitaba partidas para realizar tres proyectos valorados en unos 7 millones de euros.
En esta alegación Simarro asegura que ante la sentencia que obliga a pagar esta elevada cantidad «nos vemos obligados a desistir de la construcción del aparcamiento de la calle Cetre y al proyecto de rehabilitación del teatro Fantasio».
El proyecto de reforma del polideportivo también se verá afectado y se deberá reducir en más de 217.000 euros aunque se conserva poco más de un millón para la inversión.