Los alcaldes de Pollença y de Alcúdia, Tomeu Cifre y Bàrbara Rebassa, se han reunido para coordinar acciones conjuntas contra el aumento de contagios de COVID-19 y mejorar la vigilancia en las zonas rústicas durante el invierno.
Según ha informado el Ayuntamiento de Pollença en una nota de prensa, en la reunión han participado también los jefes de la Policía Local, los regidores responsables del área de ambos ayuntamientos y el destacamento de la Guardia Civil de la zona.
«Ha sido una reunión muy fructífera que queremos ir realizando de forma periódica con unos objetivos muy claros: actuar coordinados, evitar contagios, proteger a la ciudadanía, controlar los puntos de acceso a los municipios y recordar la importancia del cumplimiento individual y exhaustivo de las normas preventivas higiénico sanitarias», ha explicado el alcalde de Pollença, Tomeu Cifre.
De hecho, ha señalado que este fin de semana ya han emprendido acciones conjuntas, que han tenido como resultado la apertura de 50 actas por incumplimientos como no llevar mascarilla, fumar en la calle, aforo excesivo y reuniones con más gente de la permitida.
En cuanto a la vigilancia en zonas rústicas en invierno, la prioridad es «retomar un proyecto de seguridad vecinal y proteger las viviendas de estas zonas que, normalmente en esta época del año, están menos habitadas».
«Hemos establecido una serie de acciones con las fuerzas de seguridad de Alcúdia y Pollença con el objetivo de poder actuar de la manera más rápida, efectiva y coordinada posible y bajar, así, el número de hurtos», ha indicado Cifre.