La recaudación por multas de exceso de velocidad registrados por los ocho radares fijos instalados en la red viaria de Mallorca cayó un 64 por ciento en 2019. Año en que el número de infracciones detectadas también disminuyó en un 50 por ciento. Según datos elaborados a partir de los recogidos por Europa Press Data, la Dirección General de Tráfico (DGT) ingresó durante el año pasado 6.401.000 euros menos que en 2018, cuando el número de conductores cazados por los radares fijos de la Isla permitió entonces al mencionado organismo dependiente del Ministerio del Interior recaudar 9.851.900 euros.
Como ocurre con el número infracciones denunciadas por radar fijo, el instalado en Calvià, en el punto kilométrico 15,5 de la Ma–1 en dirección a Santa Ponça, a la altura del polígono de Son Bugadelles, es el que más dinero recaudó en 2019 con un total de 2.471.400 euros. Un 40,6 por ciento menos de la cuantía ingresada el año anterior: 4.163.900 euros.
A la hora de hacer caja, tras el radar fijo de Calvià se sitúa a mucha distancia el situado en kilómetro 50,2 de la Ma–2200 entre sa Pobla y Pollença. En este tramo, las infracciones registradas supusieron para la DGT una recaudación de 340.000 euros el año pasado, un 38,3 por ciento menor a la registrada en 2018, que ascendió a 552.000 euros.
En el tercer puesto del podio aparece el control de velocidad permanente del kilómetro 5,2 de la Ma–4020, la carretera que une Manacor y Porto Cristo. Durante 2019, las multas por exceso de velocidad generaron para la administración del Estado unos ingresos de 165.200 euros. Un 75,9 por ciento menores a los contabilizados el ejercicio anterior, cuando alcanzaron los 687.000 euros. Tras el de la carretera Manacor–Porto Cristo y en el cuarto lugar de ranking recaudatorio figura el radar fijo clavado en el punto kilométrico 8,9 de la autopista de Llucmajor Ma–19. Las sanciones por velocidad excesiva arrojaron el año pasado unos ingresos de 137.700 euros frente a los 178.600 de 2018, lo que supone una merma del 22,9 por ciento respecto a esa campaña. En quinto lugar, el cinemómetro del punto kilométrico 16,1 de la autopista Ma–13 de Inca, entre los municipios de Santa Maria y Consell. La recaudación en 2019 sumó 100.700 euros, un 87,6 por ciento menos que 12 meses atrás.
Le siguen los situados en el punto kilométrico 24,1 de la Ma–12, que conecta las poblaciones de Artà y Alcúdia, y en el 30,1 de la Ma–19 entre Llucmajor y Campos. Ambos recaudaron respectivamente el año pasado un 64,6 y un 96,7 por ciento menos que en 2018. La razón de la brutal caída del segundo obedece a las obras de desdoblamiento que empezaron a ejecutarse en 2019.
Finalmente, está el radar del kilómetro 8,9 de la Ma–13. Los ingresos derivados de las multas por exceso de velocidad generaron para la DGT 64.800 euros. Una cifra un 89,8 por ciento inferior a la del año anterior.