Rachas de hasta 120 kilómetros por hora han ocasionado el caos durante la pasada madrugada en Sóller provocando centenares de incidentes, sobre todo por caída de árboles y elementos urbanos, y dos pequeños pero peligrosos incendios forestales que fueron controlados en muy difíciles condiciones.
Tejas, hojas de palmeras, uralitas, cristales, rejas, han volado por los aires y algunas se han precipitado sobre coches.
Dos carreteras, la del Puig Major y la del Coll de Sóller han tenido que ser cortadas. La carretera de Coll de Sóller ha sido reabierta este sábado sobre las 14.00 horas.
El Tren de Sóller también ha tenido que interrumpir su servicio ya que la línea eléctrica se ha visto afectada por la caída de árboles. Los operarios han trabajando para poder restablecer el transporte, que ha vuelto a operar con normalidad a partir de las 15.00 horas de este sábado.
La Policía Local ha recomendado no salir de casa si no es estrictamente necesario. De momento no constan daños personales.