El alcalde de Pollença, Miquel Àngel March, y su teniente de alcalde Tomeu Cifre Bennàssar comparecieron este jueves en los juzgados de Inca para declarar como investigados a raíz de la querella criminal que ha presentado un empresario del Moll que les acusa de presunta prevaricación y malversación por impedir que su negocio obtenga la autorización para instalar su terraza en una parte de la playa de Albercuix, terraza que venía gestionando desde hace 12 años.
El empresario, que ya llevó al alcalde March y al exalcalde Cifre Ochogavía a los tribunales por consentir la explotación del quiosco de Gelats Valls sin título habilitante y sin concurso público, acusa ahora al alcalde y al teniente de alcalde de actuar «maliciosamente» con el objetivo de «perjudicarle».
La querella criminal ha sido admitida trámite y el Juzgado número 2 de Inca ha abierto diligencias. La jueza llamó este jueves a declarar a los dos investigados. Ambos se negaron a prestar declaración, alegando que la querella no se les había notificado conforme marca el procedimiento.
Lo que tratará de determinar la jueza es si el Ajuntament de Pollença solicitó a Costas la autorización para licitar en el dominio público los servicios de temporada (hamacas, sombrillas, chiringuitos y terrazas, entre otros) abonando el pertinente canon, pero después excluyó «expresa y maliciosamente» el lote que quería explotar el demandante a la hora de convocar el concurso público que regula la adjudicación del dominio público de Costas a terceros.