El pleno del Consell de Mallorca ha aprobado este jueves una moción, presentada por Cs, por la que la institución insular se compromete a considerar que las marchas 'Lluc a Peu' -tanto de Palma como de la Part Forana- sean declaradas actividades de interés cultural, una vez se apruebe el reglamento que regula esta figura.
El objetivo de la moción era ofrecer mayor protección a esta actividad, según ha informado Cs en una nota de prensa en la que ha indicado que la aprobación del reglamento se espera «en breve».
La declaración permitiría a los organizadores acelerar todos los trámites administrativos necesarios para llevar a cabo las marchas. Asimismo, la ponencia técnica de Patrimonio tomará en consideración que sean candidatas a ser declaradas Fiestas de Interés Cultural.
Además, el pleno ha aprobado, dentro de otra moción de Cs, una línea de ayudas para entidades sin ánimo de lucro que conservan y exhiben colecciones con piezas variadas del patrimonio mallorquín, de la que podrá beneficiarse el Museo de Artes Decorativas.
Desde Cs han resaltado que el museo «recientemente había anunciado que tendría que cerrar sus puertas el próximo mes de abril si no recibía ningún respaldo institucional».
Para la portavoz de Cs en el Consell, Catalina Serra, estos dos compromisos «permitirán a los mallorquines tener la garantía de poder contar con dos elementos importantes de su cultura».
Por otra parte, el pleno ha rechazado otra propuesta de Cs que pedía un informe sobre el grado de cumplimiento de las propuestas aprobadas a lo largo de la legislatura. Para la consellera de Cs Cristina Fiol «es una lástima que el Consell haya aducido problemas de plazos para no poner en marcha una medida que busca mayor transparencia de cara a la ciudadanía».
«Las propuestas de la oposición que se aprueban en el pleno suelen quedarse en un cajón, y eso no puede seguir pasando», ha protestado.
Finalmente, las conselleras de Cs han preguntado en el pleno por las medidas adoptadas por el Departamento de Territorio e Infraestructuras en esta legislatura para reducir la siniestralidad en los puntos negros de las carreteras mallorquinas, así como por la situación del Velódromo de Tirador.