Muro dio la noche del miércoles la bienvenida a las fiestas de Sant Antoni haciendo parodia de sus Beneïdes, probablemente las más lucidas y conocidas de Mallorca. La burla corrió a cargo de los Dimonis de sa Pedrera, organizadores del correfoc previo al encendido de los foguerons.
En esta previa de las Beneïdes –las oficiales tendrán lugar esta tarde–, los animales y demás elementos del acto circulaban al revés, en sentido inverso. Se trataba de unas Beneïdes «grotescas y endominades», tal y como avanzó a este diario un miembro de la colla.
El correfoc, que como es habitual finalizó con el ‘incendio' de la iglesia, lo organizaron los Dimonis de sa Pedrera y contó con la presencia de los Dimonis d'Inca, los Llepacalius de Selva y los Dimonis a Lloure de Felanitx, los cuales acudieron como colles invitadas. Uno de los momentos más esperados del espectáculo es la lectura de los versots del Dimoni Gros, que este año volvió a hacer referencia al contexto político. No se salvaron ni izquierda ni derecha. He aquí un fragmento: «Me basta amb quatre mots / per poder-ho resumir: / No sé per què me feis venir / si tanmateix teniu Vox. // Benvinguts a un any nou / un Walking Dead ben polit. / Ressucita un partit / que guanyà el trenta-nou. // Fins i tot s'ecologista / li pega fort a s'esquerra. // El PP fa els ous enterra, / tots li passen per la dreta. / No n'hi surt cap de condreta / a n'en Sánchez quan vos xerra».
Pero la fiesta comenzó antes del correfoc, cuando los dimonis y Sant Antoni salieron del convento de Santa Anna para fer bulla en su trayecto a la plaza del Comte d'Empúries. Una vez allí cedieron el protagonismo a los Dimonis dels Tres Tombs, que escenificaron su peculiar baile.
45 foguerons
Después del correfoc, la fiesta se desplazó a las calles y a los domicilios particulares, donde se encendieron hasta 45 foguerons. Es el momento de celebrar la fiesta con la familia y con los amigos, de torrar, de calentar el cuerpo con un trago de herbes dolces, de improvisar alguna glosa...
Otra de las novedades de este año es que el colectivo de jóvenes Sense Filtre puso una cena (dos trozos de carne de cerdo, uno de longaniza y un butifarrón, además de bebida) y caliu para torrar a disposición de la gente al precio de 4 euros. Con esta iniciativa, se busca que la gente venida de otros pueblos a disfrutar de la fiesta pero que no ha sido invitada a un fogueró particular pueda celebrar Sant Antoni.
La fiesta se reanuda este jueves a las diez y media con la plantada de gegants frente al Ajuntament. A las 11 horas, el obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull presidirá el oficio de Sant Antoni; a continuación, las autoridades celebrarán su almuerzo protocolario, y a las 15,30 horas comenzarán las Beneïdes (las de verdad).