Robert Fall y su esposa se han vuelto encontrar, un verano más, con Amable Serrano y Antonio Lozano, los agentes de la policía local de Calvià que dos años atrás le salvaron la vida tras sufrir una parada cardiorrespitaratoria mientras disfrutaba de sus vacaciones en un hotel de Palmanova.
En su cita, ya convertida en algo habitual desde que ocurrió el suceso en 2016, Robert les comentó que está muy recuperado y que este año se ha jubilado.