Haciendo gala de su defensa de las consultas populares, Més-Esquerra, en la oposición del Ajuntament de Manacor, ha abierto una votación digital preguntando sobre la conveniencia o no de seguir lanzando los fuegos artificiales de las fiestas de Porto Cristo y s'Illot.
La coalición abre el debate sobre si estos actos tradicionales se tienen que mantener o no cuando estos duran aproximadamente 15 minutos y su coste aproximado es de 14.000 euros en Porto Cristo y unos 7.000 en s'Illot. Unos 21.000 euros en total.
La historia nos recuerda que durante muchos años los fuegos artificiales de Porto Cristo eran un detalle de las Cuevas del Drac. Pero desde hace un par no. Y los de s'Illot tienen un coste menor para las arcas municipales, ya que se suele repartir con el municipio vecino de Sant Llorenç.
Los ecosoberanistas y republicanos afirman que los fuegos artificiales cierran las fiestas patronales de ambos núcleos y que estos movilizan a miles de personas que llenan bares y cafeterías. Pero también, «además del coste, hay que añadir la suciedad que se genera y el riesgo para las embarcaciones». Se les olvidó hacer referencia al mal trago que sufren sobre todo los perros del lugar y demás animales de compañía.
La parte positiva de la propuesta es que la gente, aunque sea por internet, vote sobre una cuestión municipal. Sin duda tendría que ser una costumbre más arraigada a pesar de que el resultado no sea siempre el esperado.
ero ahora permítanme la licencia de imaginarme una consulta popular sobre los fuegos artificiales al estilo del referéndum catalán del 1 de octubre. Policías locales buscando urnas por doquier porque la ley no lo permite, el reparto ‘clandestino' de papeletas... y el día de la celebración colas de gente para garantizar la apertura de espacios públicos para la votación, palos y más palos a las puertas de los colegios electorales... sólo para escuchar o conocer la opinión de los ciudadanos. Tranquilos que no veo ni a Miquel Oliver ni a Joan Llodrà yendo a declarar a los juzgados o en el exilio.
Se me fue la olla. Lo sé. Pero consultar no tendría que ser nunca delito. Se trata de democracia, aunque hablemos de los fuegos artificiales de s'Illot y Porto Cristo.