El único edil de Sí Se Puede (SSP) en el Ajuntament de Calvià, Fernando Alcaraz, se alineó este lunes junto a PP y Ciudadanos (C's), e impidió con su voto contrario la aprobación de los presupuestos municipales previstos para 2018.
Con su voto consonante con los de los partidos de la derecha, Alcaraz no solo crea un gran problema al gobierno socialista para que pueda gestionar con garantías el día a día de los vecinos del Calvià, sino que falta a la palabra dada hace un mes de no montar «un circo» y boicotear las cuentas del ejecutivo municipal del que hasta las vísperas de Navidad formaba parte.
Cabe recordar que el pasado 14 de diciembre, el alcalde Alfonso Rodríguez Badal (PSOE) destituyó a Fernando Alcaraz como teniente de alcalde de Juventud y Participación por «la desproporción de las partidas presupuestarias solicitadas», que a juicio del alcalde, no estaban de acuerdo con el interés general de los calvianers.
Hasta el momento de la votación final, nada hacía pensar que Alcaraz se revolvería contra unas cuentas que, tal y como reconoció, apenas diferían de las que él mismo había manejado antes de ser destituido.
Por su parte, el alcalde reconoció que no se esperaba el voto contrario de Fernando Alcaraz y aseguró que su decisión es la demostración de «la inconsistencia de la llamada ‘nueva izquierda'. Ahora muchos comprenderán la situación límite a la que nos llevó Alcaraz cuando decidimos romper el pacto», dijo al respecto.
Badal también quiso tranquilizar a los ciudadanos del municipio y apuntó que con la prórroga del presupuesto de 2017 los vecinos no padecerán «la irresponsabilidad de la ‘nueva izquierda'», y añadió que «no aceptará chantajes ni venganzas».